En mis artículos he hablado a menudo de cómo el sistema actual suprime la singularidad y el desarrollo de nuestras propias capacidades intelectuales y, a veces, incluso lo logra a través de nuestra sociedad. Aquí también nos gusta hablar de los llamados “guardianes humanos”, es decir, personas que han sido condicionadas + programadas de tal manera que sonríen y rechazan todo lo que no corresponde a su propia visión del mundo condicionada y heredada. De esta manera, el sistema basado en la desinformación es inconscientemente protegido por la población y todas las personas que se rebelan contra él + plantean cuestiones críticas con el sistema son automáticamente excluidas y difamadas como teóricos de la conspiración, populistas de derecha o incluso como ciudadanos del Reich ( un ejemplo destacado, véase Xavier Naidoo).
La supresión intencional de nuestra expresión creativa única.
En última instancia, este comportamiento dentro de la población no es resultado de la casualidad, sino más bien intencional. El desarrollo de nuestra propia mente egoísta + la supresión asociada de nuestra alma (supresión de nuestra alma + desarrollo de nuestra propia mente EGO/mente orientada a lo material) es mucho más un objetivo que fue puesto en práctica por personas poderosas detrás de él. En este contexto, una sociedad orientada materialmente, que ridiculiza a las personas que piensan diferente y difunde juicios o los legitima en sus propias mentes, también promueve la creación de estructuras de poder. Como resultado, los humanos nos rebelamos mucho menos, no nos ocupamos del verdadero trasfondo geopolítico, investigamos menos y, como resultado, nos preocupamos mucho más por los juicios, la hostilidad y los aspectos supuestamente negativos de nuestros semejantes. Por tanto, los juicios y las blasfemias son veneno para nuestra propia mente. Estos comportamientos egoístas no sólo nos distraen de los verdaderos acontecimientos geopolíticos, no sólo desvían nuestra atención hacia lo innecesario, sino que también nublan nuestro estado de conciencia, son esencialmente destructivos por naturaleza y perjudican el desarrollo posterior del estado de conciencia colectivo. Sin embargo, cada vez más personas están aceptando sus propias mentes egoístas y, como resultado, reconocen sus juicios creados por ellos mismos, reconocen sus programas condicionados y cambian nuevamente su propio estilo de vida.
Cuanto más juicios legitima una persona en su propia mente, más se restringe el desarrollo de sus propios aspectos mentales..!!
De la misma manera, cada vez más personas reconocen el alcance de la supresión de nuestra expresión individual única, viendo a través de la contención de nuestras propias mentes + la creación asociada de personas críticas. En este contexto, he enlazado a continuación un fragmento de vídeo del documental Thrive, en el que el conocido defensor de la verdad David Icke habla sobre este problema. Al comienzo del extracto vuelve a explicar los problemas mencionados anteriormente y explica cómo estos mecanismos podrían mantener a la gente bajo control. Un vídeo que sólo puedo recomendaros encarecidamente.